Tolentino manda mensaje al presidente Abinader tras colapso del Jet Set
Su mensaje, lanzado con tono firme, cuestiona el tiempo que podría tomar el proceso de investigación y coloca el foco sobre las acciones inmediatas que deberían asumir los responsables.
“Presidente, sí, ciertamente es cuestión de esperar una investigación, pero tampoco eso quiere dejar dicho que vamos a esperar cinco años para tener un resultado“, expresó Tolentino, dejando claro que la espera no debe convertirse en excusa para la inacción.
Sus palabras apuntan directamente a la necesidad de respuestas rápidas y concretas para una ciudadanía que exige justicia tras el trágico evento.

Con especial énfasis en la figura de Antonio Espaillat, propietario del establecimiento, Tolentino sostuvo que, más allá de cualquier video expresando lamentos o aflicciones, lo correcto y lo sensato sería que para el lunes en la mañana, como tarde, este señor se ponga a disposición de la Justicia.
Según el comunicador, esto no solo aliviaría las tensiones públicas, sino que sería una señal de respeto hacia las más de 200 familias afectadas.
“Por el bien y la tranquilidad del país”, reiteró Tolentino, dejando entrever que la transparencia y la responsabilidad no deben esperar a la burocracia.

Hasta el momento, Espaillat no ha hecho una comparecencia pública formal ni ha ofrecido declaraciones directas a los medios, lo que ha mantenido el caso envuelto en una creciente expectativa.
El llamado del comunicador se suma a una serie de voces que piden medidas más contundentes, tras la difusión de videos que mostraban una sobrecarga estructural en el techo del Jet Set meses antes del desplome.
Mientras las autoridades han prometido una investigación técnica y sin presiones, desde la opinión pública se exige claridad, rapidez y consecuencias reales.
En tanto avanza el proceso judicial, las miradas se centran ahora en si el empresario Antonio Espaillat atenderá el pedido implícito de Tolentino y se presentará voluntariamente ante el Ministerio Público, marcando un punto de inflexión en el caso que mantiene a todo el país a la expectativa.