Si tu pareja siempre te pide por detrás, es que…Ver más
Ella lo notó desde hace meses. No era solo un gesto, ni un capricho pasajero… era una insistencia que aparecía cada vez que la intimidad los envolvía.
Al principio no le dio importancia, creyó que era mera curiosidad, un juego más entre dos personas que se aman. Pero con el tiempo empezó a sentir que había algo detrás… algo que él no decía, algo que escondía entre sus silencios y sus manos temblorosas.
Una noche, mientras el agua caliente corría sobre sus cuerpos y el mundo desaparecía detrás del vapor, él volvió a pedírselo. Esta vez, ella no respondió de inmediato. Lo miró directo a los ojos, buscando una verdad que llevaba tiempo evitando.
Su respiración cambió. Sus hombros se tensaron.
—¿Por qué siempre lo pides así? —susurró ella, sin reproches, solo con un miedo suave que le rozó el alma.
Él tragó saliva, bajó la mirada y, por un instante, ella vio cómo se derrumbaba ese hombre seguro que siempre conoció. No era deseo… era necesidad. No era fantasía… era una confesión a medias que todavía no se atrevía a decir.
El silencio se llenó de dudas, de vulnerabilidad, de secretos que estaban a punto de salir a la luz…
Y lo que él estaba por revelar cambiaría completamente la forma en que ella lo veía.
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