Para muchos, orinar en la ducha es un tema tabú, pero lo cierto es que esta práctica tiene más beneficios de los que podrías imaginar. Además de ser una opción cómoda y eficiente, tiene ventajas para la salud, la higiene y el medioambiente. Si aún dudas sobre si deberías hacerlo, aquí te explicamos por qué esta costumbre podría ser más beneficiosa de lo que piensas.
No podrás creer lo beneficioso que es orinarte en la ducha mientras te bañas
Para muchos, orinar en la ducha es un tema tabú, pero lo cierto es que esta práctica tiene más beneficios de los que podrías imaginar. Además de ser una opción cómoda y eficiente, tiene ventajas para la salud, la higiene y el medioambiente. Si aún dudas sobre si deberías hacerlo, aquí te explicamos por qué esta costumbre podría ser más beneficiosa de lo que piensas.
1. Ahorro de Agua
Cada vez que tiras de la cadena del inodoro, usas entre 6 y 12 litros de agua. Al orinar en la ducha, esa descarga se vuelve innecesaria, lo que supone un ahorro significativo a lo largo del tiempo. Esto ayuda a la conservación del agua, un recurso esencial que debemos proteger.
2. Más Higiénico de lo que Crees
A pesar de lo que muchos piensan, orinar en la ducha no es antihigiénico. La orina es, en su mayoría, estéril y no representa un riesgo para la salud cuando entra en contacto con la piel o el agua. Además, el agua y el jabón con los que te duchas eliminan cualquier residuo inmediatamente.
3. Bueno para la Piel y las Pequeñas Heridas
La orina contiene urea, un compuesto que se encuentra en muchas cremas y productos dermatológicos. Se ha demostrado que la urea ayuda a hidratar la piel y acelerar la cicatrización de pequeñas heridas o cortes.
4. Beneficioso para el Medioambiente
Reducir la cantidad de descargas en el inodoro disminuye el uso de productos químicos que se emplean en las plantas de tratamiento de aguas residuales. A la larga, esto puede contribuir a un menor impacto ambiental.
Conclusión
Orinar en la ducha mientras te bañas no solo es una forma práctica de ahorrar agua y tiempo, sino que también puede tener beneficios para la piel y el medioambiente. Así que la próxima vez que te encuentres en la ducha con ganas de orinar, no te sientas culpable: ¡estás contribuyendo de manera positiva al planeta!