Podemos decir que el ombligo es una cicatriz que nos queda cuando nacemos. Mediante este obteníamos nutrientes y oxígeno cuando estábamos en el vientre de nuestra madre. El ombligo es una parte de nuestro cuerpo que puede tener información importante sobre el individuo.

A continuación, se encuentra una imagen, elige la que más se parezca a tu ombligo; y luego busca la información que tenemos sobre el.

Primero. Este es el ombligo salido. Este es en realidad una pequeña hernia; lo que significa que eres propenso a desarrollar una hernia. Aunque, no es nada grave, solo debes de tener cuidado y asistir a tus consultas rutinarias con el doctor. En caso de que estés embarazada, tener el ombligo de esta manera es completamente normal.

Segundo. Ombligo hundido. Este es muy común en personas con sobre peso o que tienen mucha grasa abdominal. También aparece en personas muy delgadas, pero con vientres abultado. Esto puede significar que tienes problemas de digestión.

Tercero. Ombligo alargado. El ombligo alargado significa que tienes músculos abdominales muy fuertes. Normalmente, las personas con este tipo de ombligo antes tenían uno hundido pero al trabajar la zona abdominal se terminó convirtiendo en uno alargado.

Cuarto. Ombligo con forma de T. Tiene una forma alargada, pero en la parte superior tiene una pequeña línea. Las personas con este tipo son propensas a sufrir de dolores musculares con mucha facilidad. Por lo que, debes de tomar precauciones.

Quinto. Este tiene la forma de una u o c. Este es uno de los menos frecuentes; significa que el cordón umbilical se cerró de manera extraña. Puede significar que ocurrió algo durante la formación del feto o durante el parto. Las personas con este tipo son más propensas a enfermarse. No obstante, si no te enfermas constantemente; entonces no te debes de preocupar.

Sexto. Tiene la forma de una almendra. Si tienes este tipo, puede sufrir de dolores musculares; los cuales pueden incluso desgarrar tu músculo. Por loa que debes de tener cuidado con los esfuerzos físicos.