¿ORINAR EN LA DUCHA ES MALO PARA LA SALUD?
INTRODUCCIÓN
Me han preguntado recientemente en la sección de comentarios de este sitio web sobre los riesgos de orinar en la ducha. Al principio, la pregunta me sonó peculiar y divertida, ya que la respuesta parecía bastante obvia. Sin embargo, al buscar en Internet, descubrí que se trata de una pregunta bastante común en muchos foros de salud.
Orinar en la ducha, sobre todo en casa, es una práctica habitual que adopta la mayoría de la gente. Curiosamente, esta cuestión parece ser un tema de debate y controversia y no todo el mundo se siente cómodo discutiéndolo.
Algunas personas consideran que orinar en la ducha es inofensivo, respetuoso con el medio ambiente y un uso más eficiente del agua, mientras que otras lo consideran insalubre y antihigiénico.
En este artículo veremos las razones por las que algunas personas deciden orinar en la ducha, las posibles repercusiones de este hábito en la salud y el medio ambiente, y si es o no tan malo como algunos imaginan.
¿DE QUÉ SE COMPONE LA ORINA?
Para saber si orinar en el baño puede causar o transmitir enfermedades, o ser perjudicial para el medio ambiente, tiene sentido comprender de qué es hecho nuestro pis.
La orina se produce a partir de la filtración de la sangre por los riñones. Se compone básicamente de una gran cantidad de agua y un pequeño porcentaje de diversos tipos de solutos presentes en la sangre.
Típicamente, en un litro de orina tenemos la siguiente composición:
- Agua: 950 ml.
- Urea: de 9 a 23 g.
- Cloro: de 1,8 a 8,4 g.
- Sodio: de 1,2 a 4,4 g.
- Potasio: de 0,7 a 2,6 g.
- Sulfatos: de 0,2 a 2,2 g.
- Creatinina: de 0,6 a 2,1 g.
- Fósforo: de 0,4 a 1 g.
- Amonio: de 0,2 a 0,7 g.
- Ácido úrico: de 0,04 a 0,6 g.
- Bicarbonato: de 0,02 a 0,5 g.
- Calcio: de 0,03 a 0,4 g.
Como vemos, el 95% de la orina está formado por agua. Esta cantidad puede variar un poco más o menos, según el estado de hidratación del individuo.
El pH de la orina suele ser ligeramente ácido, oscilando entre 5,5 y 7,0 en la mayoría de las personas.
Así pues, desde un punto de vista estrictamente químico, no hay nada en la orina que cause daños al cuerpo humano o al medio ambiente. Puedes orinar libremente en la ducha, sin culpa y sin riesgo de provocar contaminación ambiental.
¿SE CONSIDERA QUE LA ORINA ES LIMPIA?
Si el concepto de suciedad está relacionado con la presencia de gérmenes y microbios, la orina es un fluido bastante limpio. Más limpio incluso que tu piel y tu boca.
La orina es un fluido corporal básicamente estéril. No está completamente libre de bacterias, pero en personas sanas, la cantidad de gérmenes es insignificante y clínicamente irrelevante.
La orina es muy diferente de las heces, que, incluso en personas sanas, contienen una enorme cantidad de bacterias, virus, hongos e incluso protozoos. La orina también tiene muchos menos microbios que muchos otros fluidos corporales, como la saliva, las secreciones nasales e incluso el sudor.
¿LA ORINA TRANSMITE ENFERMEDADES?
Aunque la orina de las personas enfermas puede contener gérmenes, no existen casos descritos de transmisión directa de infecciones de una persona a otra a través de la orina.
Por ejemplo, no puede contraer el VIH, herpes, sífilis, gonorrea, clamidia ni ninguna otra enfermedad de transmisión sexual a través de la orina. Lo mismo ocurre con la infección del tracto urinario, que no es una infección contagiosa. Nadie contrae una infección urinaria en un aseo público.
Pocas enfermedades se transmiten a través de la orina. Algunos ejemplos son el citomegalovirus y la fiebre tifoidea, pero la contaminación se produce por el consumo oral de agua contaminada y no por el contacto orina-piel en un aseo público, por ejemplo.
La leptospirosis es la principal enfermedad que puede transmitirse por contacto orina-piel, pero esto sólo ocurre con la orina de animales infectados, como las ratas, no con la orina humana. La leptospirosis es una zoonosis, es decir, una enfermedad que se transmite de animales a humanos y no de humanos a humanos.
Por lo tanto, si frecuenta los aseos públicos, no debe preocuparse por el riesgo de contraer enfermedades si alguien ha orinado en el suelo justo antes de ducharse. Puede contraer infecciones del suelo de los aseos públicos, como micosis de las uñas, pie de atleta o una infección cutánea por la bacteria Staphylococcus aureus, pero no tienen nada que ver con la orina.
Y la verdad es que si frecuenta piscinas públicas, especialmente con niños, puede estar seguro de que su piel ya ha entrado varias veces en contacto con la orina. El contacto con la orina de otras personas en las duchas públicas es mucho menor que en las piscinas.
VENTAJAS DE ORINAR EN LA DUCHA
La gran ventaja de orinar en la ducha es el ahorro de agua y papel higiénico. Las organizaciones de protección del medio ambiente estiman que cada persona podría ahorrar hasta 5.000 litros de agua de la cisterna si al menos una micción del día se realiza en el baño.