Estudios demuestran que el consumo de probióticos disminuye la rinitis alérgica.
Este trabajo fue dirigido por el científico Liu Dongliang y sus colegas. El objetivo de este estudio fue investigar si la suplementación con productos que alteran el microbioma intestinal, como los probióticos , puede ser útil para tratar la rinitis alérgica.
¿Qué es la rinitis alérgica?
La rinitis alérgica es una condición que ocurre cuando el sistema inmunológico de una persona reacciona de manera excesiva a sustancias que normalmente no deberían causar una reacción, como el polen, el polvo o el moho. Los síntomas comunes de la rinitis incluyen estornudos, congestión nasal, picazón en los ojos o la nariz y secreción nasal. Las personas que sufren de rinitis alérgica suelen tomar medicamentos como antihistamínicos y descongestionantes para aliviar estos síntomas.
El papel del microbioma gastrointestinal
El microbioma gastrointestinal es el conjunto de bacterias y otros microorganismos que viven en nuestros intestinos. Estos microorganismos tienen un papel muy importante en nuestra salud general, especialmente en la forma en que nuestro cuerpo maneja las infecciones y controla el sistema inmunológico. Un microbioma equilibrado ayuda a mantener nuestra salud, pero cuando este equilibrio se altera, se pueden desarrollar problemas de salud, como las alergias.
En los últimos años, los investigadores han comenzado a descubrir que el microbioma intestinal podría estar relacionado con las alergias. Algunas investigaciones sugieren que si el microbioma está desequilibrado, podría contribuir a reacciones alérgicas como la rinitis. Por eso, algunas personas están interesadas en suplementos que puedan mejorar o equilibrar este microbioma, con la esperanza de que esto ayude a controlar las alergias.
Los probióticos son bacterias beneficiosas que se pueden encontrar en alimentos como el yogur o en suplementos. El estudio también se centró en analizar si estos tratamientos son seguros para las personas.
¿Cómo se llevó a cabo la investigación?
Para responder a estas preguntas, los científicos realizaron una revisión sistemática . Esto significa que revisaron todos los estudios científicos previos sobre el tema. Analizaron ensayos clínicos, que son estudios donde se prueba un tratamiento en personas. Luego, los investigadores utilizaron una técnica llamada metaanálisis , que consiste en combinar los resultados de varios estudios para obtener una conclusión más precisa y confiable. También aplicaron un análisis secuencial , lo que les permitió ver si los resultados de los estudios eran consistentes y si se mantenían cuando se incluían nuevos datos.
El equipo de investigación revisó ensayos en los que se trataba a personas con rinitis alérgica usando suplementos que afectan al microbioma, y evaluaron tanto los beneficios como los posibles efectos secundarios de estos tratamientos.
Resultados del estudio
Los resultados del estudio mostraron que la suplementación con probióticos y otros suplementos para el microbioma gastrointestinal podría ser útil para las personas con rinitis alérgica. Los pacientes que tomaron estos suplementos experimentaron una mejora en los síntomas de la rinitis, como los estornudos y la congestión nasal. Aunque los resultados fueron prometedores, también se observará que los efectos no eran iguales para todas las personas. Algunos pacientes respondieron mejor al tratamiento que otros.
Además, los científicos concluyeron que estos suplementos son generalmente seguros. En los estudios revisados, no se encontraron efectos secundarios graves en las personas que tomaron los probióticos o suplementos relacionados con el microbioma intestinal. Esto sugiere que, en general, estos tratamientos son bien tolerados.
¿Qué significa todo esto?
Este estudio proporciona evidencia de que, en algunas personas, la suplementación con probióticos y otros suplementos para equilibrar el microbioma intestinal puede ser una opción útil para controlar los síntomas de la rinitis alérgica. Sin embargo, los investigadores también señalaron que es necesario realizar más estudios para comprender mejor cómo funcionan estos tratamientos y por qué algunas personas responden mejor que otras.